viernes, 30 de diciembre de 2011

CHIN CHIN

Feliz 2012...

Les deseo un año lleno de alegrías y fuerzas para todos. Lo mejor para este nuevo año. GRACIAS por acompañarme en este mini camino que empecé.




con cariño y amor, les desea esta Estudiante.

Gloria.

domingo, 25 de diciembre de 2011

martes, 13 de diciembre de 2011

"Que Dios, la Patria y él me lo demanden"


“Mientras haya un pobre en Argentina no va estar completado el proyecto nacional y popular”; fueron las palabras que manifestó, en el día de su asunción, la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner; reelecta por el 54 porciento de los votantes argentinos.
La presidenta llegó al Congreso de la Nación minutos antes de las doce del mediodía acompañada de sus dos hijos. El primero que entró a la cámara baja y tomó juramento fue el vicepresidente electo Amado Boudou. Luego, ingresó Cristina recibida con una ovación producida por los presentes en la sala de diputados. Allí se encontraban algunos de los presidentes latinoamericanos, delegaciones extranjeras, diputados y senadores de la nación, algunos gobernadores e intendentes; y familiares, seguidores de la presidenta.
La elegida por la mayoría del pueblo argentino juró ante la Constitución nacional y los Santos Evangelios por el bienestar del país y si no cumpliera con lo prometido, manifestó en un tono firme, “que Dios, la Patria y él me lo demanden”. La presidenta emocionada recibió de su hija Florencia la banda presidencia y luego, tomó el bastón. Se estrecharon en un abrazo, y los aplausos de parte del público seguían mientras caían papelitos desde las alturas del Congreso.
Nuevamente como Jefa de Estado de la República Argentina, para los próximos cuatro años, comenzó su discurso acompañada de su vicepresidente. Por más de una hora  sus palabras se refirieron, principalmente, sobre los cambios positivos que generaron los anteriores dos gobiernos (el del ex presidente Néstor Kirchner -2003/2007- y el de Cristina Kirchner -2007/2011- ). “Han cambiado las cosas de aquel 25 de mayo de 2003 en Argentina y en el mundo”, manifestó la Presidenta. Y agregó: “Estamos en una nueva Argentina”.
Su discurso, también, tuvo énfasis, por un lado, sobre los empresarios, aclarándoles que “yo no soy la presidenta de las corporaciones sino de los 40 millones de argentinos”. Por otro lado, fue dirigido hacia los trabajadores y sindicatos que les manifestó que tienen permitido el derecho a huelga pero “no de chantaje ni de extorsión”.
La presidenta, además, anunció que se creará dos Secretarías dentro del Ministerio de economía, una de comercio exterior con el objetivo de unirse con la ya establecida Secretaria de comercio interior; y la otra que se fundará es la de competitividad.
Del mismo modo, les pidió tanto a los diputados como a los senadores de la nación que debata y sancione la Ley penal tributaria y la Ley de tierra.
Cristina Fernández de Kirchner finalizó su discurso, casi a la una y media del mediodía, prometiéndole al pueblo argentino que “no voy a dejar mis convicciones”, comparándose rápidamente con su marido, al referirse, que no sólo Néstor Kirchner no abandonó sus convicciones sino que “también dejó su vida” por ello.
La Presidenta junto a sus hijos y el Vicepresidente Amado Boudou salieron del Congreso de la Nación, dando comienzo, a partir del 10 de diciembre de 2011, un nuevo gobierno hasta el año 2015.

Felices 100 años, Villa de Mayo



“Que lo cumplas Feliz, que lo cumplas Feliz, que lo cumplas Villa de Mayo, que lo cumplas feliz”, eran las estrofas que entonaban los villamayences por su aniversario número 100.
La localidad que se encuentra ubicada en el partido de Malvinas Argentinas (provincia de Buenos Aires) nació el 4 de diciembre de 1911 cuando el ministro de Obras Publicas, Ezequiel Ramos Mejía, firmó la resolución para colocar el nombre de Villa de Mayo a la estación de tren que se había construido. Es por eso, que se decidió que el festejo por su primer centenario se debía realizar a pasitos de la estación.
Empezó a la mañana con la bendición del sacerdote de la Iglesia de Guadalupe y las palabras del Intendente del municipio, Jesús Cariglino. Para luego, dar comienzo la primera actividad pautada que consistió en una bocicleteada familiar. En el que se transitó por algunas de las calles más conocidas del barrio, como Rosario, Sucre, entre otras. Al finalizar la carrera se entregaron bicicletas y televisores LCD al público.
A partir de las cinco de la tarde empezó la segunda parte de los festejos. Los habitantes de Villa de Mayo y de otras localidades aledañas se fueron acercando hasta donde estaba ubicado el escenario. Allí se iban presentando varios artistas que vivían en la zona. Hasta que alrededor de las nueve de la noche comenzó el mini recital de Banda XXI como el último show del día.
Según los organizadores del evento, comentaron que hubo aproximadamente 30 mil personas presentes que pudieron disfrutar de los diferentes espectáculos y del cierre de la noche con un show de fuegos artificiales que iluminó el cielo, en su primer centenario, de Villa de Mayo.


                      

 



domingo, 4 de diciembre de 2011

“Quiero morirme como médico”


Armando Martín Martín desde 1957 es el primer médico que tuvo la localidad de Villa de Mayo. Cuando realizó la carrera de medicina compartió materias con el “Che” Guevara. Con el paso del tiempo, participó del equipo médico de la NASA que asistió a la misión que llevó por primera vez al hombre a la luna. Hoy sigue atendiendo a los pacientes del PAMI y asegura que no quiere jubilarse.

-¿Por qué decidió estudiar medicina?
- Cuando tenía seis años vi una película que se trataba de un sacerdote que curaba y se apiadaba de los leprosos que eran ahislados de las grandes ciudades para que no contagiaran a nadie. Cuando observé las imágenes del film que me impactaron, me dije: “Cuando sea grande voy a ser médico y a curar la lepra”. Además, en mi familia nadie había estudiado esa profesión.

-¿Dónde estudió y en qué año se recibió?
- Terminé el bachillerato en 1948. Al año siguiente ingresé a la facultad de medicina de la Univarsidad de Buenos Aires. Tenía que dar un examen de ingreso e incluso pagar. Una vez dada la prueba correctamente, el número de estudiantes que habíamos entrado era de unas 2 mil personas. Pero al recibirnos en 1955 sólo éramos 60 ya que algunos abandonaban la carrera u otros, posponían materias y se recibían después. Entre algunos compañeros que tuve, el “Che” Guevara, fue unos de ellos.

-¿Qué recuerda de él?
-  Guevara era muy buen compañero. Estuvimos en sólo algunas comisiones de trabajo de la Universidad. Después, Ernesto desapareció y me enteré que se había ido a Chile con un amigo. Nunca más supe de él.

-¿Qué opinión tiene de él?
- Yo lo respeto como persona aunque no convulgue con algunos de sus ideales. Creo que en muchas cosas él estaba equivocado pero otras eran muy acertadas. Igual, si hay que juzgarlo o no en algo, hay que ponerse en el momento social, político e histórico en el que sucedieron los hechos.

-¿Qué pasó luego de recibirse como doctor?
-Cuando me recibí tenía 24 años y no sabía como empezar a encarar mi profesión. Me gustaban muchas especialidades pero comencé a especializarme en psiquiatría aunque mi familia me decía que aquellos que estudiaban eso, se volvían locos. Pero igual me anoté en un concurso que se abría en el hospital Moyano y lo gané. Habíamos entrado alrededor de 20 personas que nos repartieron en distintas salas; y a mí me tocó un recinto con 200 internadas por ser homicidas o suicidas.
En 1956 decidí irme al interior a trabajar en otra especialidad como médico clínico.

-¿Dónde trabajó?
- Fui a un pueblo que se llama Piedras Blancas que queda en el norte de Entre Ríos. Allí hice de todo porque era el único médico del lugar. Hasta ayude una yegua a que tenga su potrillo. La anécdota comienza a partir de que yo era médico de los obreros que trabajaban en la única fábrica del pueblo. Un día me llaman para que atendiera a una yegua, ellos pensando que yo sabía sobre eso, pero no tenía ni la menor idea. Atendi al animal que estaba tirada apretándole la panza hasta que finalmente empezó a salir la cría. Pero luego, los dueños querían matar al bebé porque sino iba a estar al lado de la yegua amamantándose y esa yegua no iban a tenerla para trabajar. Entonces decidí quedarme con el potrillo. Lamentablemente con el tiempo se me murió.

-¿Cuánto tiempo se quedó en Entre Ríos?
- Menos de un año. Me fui porque en la fábrica para la cual yo trabajaba me obligaron a que les informaran a ellos primeros sobre aquellos obreros que tenían alguna enfermedad de alta gravedad, asi los hechaban rápidamente. Yo me negué a eso, aclarándoles que tanto la empresa como yo, estábamos obligados a curar a los empleados que sufrían algún tipo enfermedad. Eso, obviamente, me costó a que me despidieran.

-Cuando se va de Piedras Blancas, ¿Llega a Villa de Mayo?
- En realidad, cuando retorné a Buenos Aires, me volví con mis amigos de psquiatría. Pero uno de ellos me comenta que existía un lugar que se llamaba Villa de Mayo y no tenía un doctor. Sin dudarlo, me vine en 1957 para acá. Primero alquilé esta casa y luego la pude comprar. A partir de ahí, me puse en contacto con varias personas.

-¿Qué recuerda de Villa de Mayo en ese momento?
- Todas las calles eran de tierra. No había teléfono, el único que existía era en el Indu Club. Por ejemplo, con la farmacia teníamos dos palomas mensajeras y combinamos con la droguería. Por lo tanto, cuando el farmacéutico quería realizar el pedido le mandaba una paloma y si existía alguna urgencia le mandaba la otra.  

-¿Es cierto que trabajó en la NASA?
-Sí.

-¿Cómo llegó hasta ese lugar?
- A raíz de que en un momento yo había empezado a estudiar para especializarme en medicina aeronáutica y aeroespacial. Luego las autoridades provinciales me convocaron para representar a Buenos Aires en la NASA y participar en el programa Polo.

¿Qué tipo de trabajo realizó allí?
- Estuve más en la parte de lo informativo, de cómo se preparaban los astronautas. Allí aprendí una enseñanza que la traje acá. Es que para hacer cualquier cosa en la vida se necesita de cuatro aspectos: de recursos humanos, es decir de las personas; la infraestructura adecuada para lo que querés realizar; dinero y recursos legales. Si te falta uno solo de esos aspectos, no te pongas a hacerlo por que no podés realizar lo planeado. Es una ley casi de hierro.

-Después de tantos años en Villa de Mayo, ¿Qué significa para usted esta localidad?
- Es mi vida médica, sentimental y mi posibilidad de estudiar. Aquí me formé como ser humano.

-Es médico clínico, legista, médico con orientación en aeronáutica, administrador de hospitales y profesor universitario, ¿Le faltó realizar otra carrera más?
- Me hubiera gustado estudiar filosofía. Pero sigo trabajando en la junta médica del municipio y además, atiendo a los abuelos del PAMI. Hace más de 50 años que estoy realizando la profesión que más me gusta y ya podría haberme jubilado. Pero quiero morirme como médico. Sin embargo hay una cosa que nunca hice, ni tampoco voy a hacer que es la politica. Tengo mis ideales personales pero no estoy afliado a ningún partido.

-¿Cuál es el aprendisaje que le deja día a día la medicina?
- Amar al projimo y sentirme respetado por muchos.

(Entrevista realizada en en el año2008. Este reportaje es publicado en el marco de los 100 años de la localidad de Villa de Mayo)